
La filosofía yoga elabora la teoría de las almas, que la corriente Vedanta llama atma y el Samkhya yoga, purusha. En la dimensión espiritual están en proceso de evolución porque no son perfectas, ya que si lo fueran serían Dios. Cada una tiene conciencia y es ésta la que determina ingresar a otra dimensión para vivir experiencias que contribuyan a su avance. De manera que la Conciencia será la que escogerá dónde y cuándo ingresar a esta dimensión a través del nacimiento humano. Al hacerlo queda automáticamente restringida por la naturaleza o prakriti. Su principal instrumento de percepción es la mente, por eso la Conciencia filtra un rayo de energía luminosa a la mente activándola, pero no en su totalidad. Esto hace aparecer a la mente como consciente a pesar que no lo es, porque es materia y según el yoga ésta no tiene conciencia.
Entonces tenemos que la Conciencia del espíritu es la que llamamos superior y la conciencia aparente de la mente es la conciencia inferior, con la cual vivimos el día a día. El menor flujo de energía que recibe impide que todas las áreas cerebrales se activen y por tanto la percepción que tenemos de todo es limitada. A esta deficiencia hay que agregar dos componentes de la mente que influyen en su eficacia y ellos son el ego y la emocionalidad, factores que obnubilan nuestra visión de la vida y las experiencias que vivimos.
Entonces ¿cuál ha sido el objetivo de los yoguis a lo largo de los siglos? Hacer un proceso diríamos de involución hacia el origen de la Conciencia (el camino de nivriti). Es la propuesta del sabio Patanjali que llamó samadhi a la experiencia de la Conciencia Superior y que es la meta de todas las formas de Yoga, incluido el Hatha Yoga que mediante la purificación del cuerpo físico y energético crea las condiciones favorables a tal vivencia.
A esta restringida capacidad de la mente podemos llamarla conciencia inferior que es tan solo un tipo especial de conciencia que abarca mínimas áreas. En torno a ella y separada por finísimas pantallas hay formas potenciales de conciencia totalmente diferentes. En otras palabras, dentro de la mente humana hay todavía un mundo sin clasificar ni conocer.
Reitero, estamos hablando de una sola Conciencia, pero que en el campo de la mente tiene una manifestación restringida a una sola área, la conciencia inferior, detrás de la cual hay un aspecto latente, la Conciencia Superior. Por lo mismo, más allá del metro cuadrado en que vivimos y nos desenvolvemos existe un campo insospechado al extremo que como es desconocido, si logramos vislumbrarlo, nos asusta. Por vivir desde y en esa pequeña conciencia inferior nos movemos acorde con los patrones y estructuras psicológicas formadas a lo largo de la vida; ellos serán los que determinarán todo el conocimiento de nosotros mismos, de los demás y de la vida en general.
Es lo que descubrieron los rishis o sabios yoguis de la antigüedad afirmando que la causa del sufrimiento está en la mente inferior y la forma de aliviarlo hasta su supresión es vivir la experiencia de vida desde la Conciencia Superior. Esto es lo que dio origen al yoga y a sus distintas variantes, todas las que apuntan a descubrir primero la conciencia inferior radicada en la mente para usarla como un trampolín o una base de despegue interestelar para superarla, elevarla y conectar la mente inferior con la superior, esta es la real “unión” de la definición de yoga.
De lo anterior se deduce que yoga es principalmente un camino de autoconocimiento (Gnana Yoga) para saber qué aspectos tengo que corregir, en donde debo trabajar y un primer paso fácil es conocer el cuerpo a través del Hatha Yoga que crea las condiciones para hacer un trabajo más subjetivo, trabajar en la mente y el ejercicio de ella se llama meditación.
Varias personas se resisten o no se motivan por meditar, en circunstancias que es la gimnasia de la mente para purificarla, aliviarla de sus tensiones, principal causa de nuestro estrés y de las enfermedades psicosomáticas.
Meditar en yoga no es reflexionar, sino que a través de una técnica disminuir el flujo de sus pensamientos, bajar su hiper actividad al máximo con lo que se evita el gasto de energía mental para luego centrarla en un punto, la etapa de la concentración o Dharana.
Hari OM